domingo, 20 de noviembre de 2011

Práctica 9-La importancia de ser diferente


Nos han repetido cientos de veces desde pequeños la importancia de una buena titulación académica, de actividades complementarias, del desarrollo de ciertas habilidades. Pero, ¿es esto suficiente?.
Desafortunadamente, o afortunadamente, dependiendo de para quién, no lo es. Existe otro aspecto a la hora de valorar al candidato perfecto para un puesto de trabajo: las competencias personales.
Estas competencias son las encargadas de diferenciar a un candidato de otro, por ello, debemos de ser conscientes de su importancia.
Podemos diferenciar dos tipos de competencias, las ordinarias y las extraordinarias. Ambas son claves para el desarrollo de actividades personales y profesionales. Sin embargo, son estas últimas las que marcan la diferencia,
actuando en momentos de crisis y mostrando la verdadera capacidad de la persona para hacer frente a todo tipo de situaciones.

Tenemos que ser conscientes de nuestras capacidades, darlas a conocer o, en caso necesario, fomentarlas.
Las competencias más importantes para nuestro ámbito profesional, el de la publicidad y la comunicación, en mi opinión, son la capacidad para trabajar en equipo, la capacidad de relación social,el pensamiento estratégico y una disposición al trabajo. Debemos saber trabajar en equipo y relacionarnos con la gente, ya que la comunicación es la base de nuestra profesión. Además, es de vital importancia adoptar un pensamiento estratégico y tener una actitud proactiva.

Creo que las competencias en las que creo tener más capacidad son el sentido de urgencia, la relación social, el pensamiento estratégico y la disposición a trabajar. Intento estar siempre pendiente de todo, mirando no solo el presente sino pensando de manera estratégica y a largo plazo.
Sin embargo, tengo problemas a la hora de trabajar en equipo y ser más paciente. Son aspectos que intento mejorar día a día, ya que sé que son de gran importancia para mi futuro profesional.

Tenemos que ser capaces de diferenciarnos, ser competentes y poder lidiar con cualquier situación que se nos presente por el camino.


"Las reglas del trabajo están cambiando, ahora se nos juzga según normas nuevas: ya no importan solo la sagacidad, la preparación y la experiencia, sino como nos manejamos con nosotros mismos y con los demás. Esta norma se aplica cada vez más para dividir quien será contratado y quien no, a quien se retiene y a quien se deja ir a quien se asciende y a quien se pasa por alto." Goleman, 1995